El Imperio Acadio, considerado el Primer Imperio de la Historia
Los orígenes de Sargón el Grande o I de Acad son desconocidos y muy parecidos a los del Moisés Bíblico. Este personaje acabó levantando el conocido como 1r Imperio de la Historia, el Imperio Acadio, y acabando con el dominio de Lugalzagesi, que había conseguido unir bajo un mismo dominio distintas ciudades sumerias.
En este vídeo te cuento como empezó y como acabó el Imperio Acadio, ¿te lo vas a perder? Te dejo el vídeo transcrito debajo por si prefieres leer, ya sabes lo que dicen, para gustos los colores y aquí no queremos hacer distinciones.
Contexto histórico
En Mesopotamia, surgió la agricultura, la rueda, la metalurgia, las ciudades y… ¿Sabes quién lo hizo posible? Unas gentes llamadas Sumerios.
Estos sumerios eran capaces de lo mejor y lo peor. Inventaron las primeras formas de escritura pero también empezaron a darse de ostias entre ellos hasta que entró en escena un tal Sargón, conocido como I de Acad o el Grande, que les dió a todos ellos.
Recordemos que Acad estaba aquí. Un poco más al norte, por aquí, estaba Ebla, dentro del territorio donde ubicamos la actual Siria. El reino de Ebla formaba parte de los reinos semíticos de la zona y ocupaba la extensión comprendida entre Hama y Aleppo.
Como casi todos los pueblos en sus orígenes, los acadios fueron nómadas que provenían de los desiertos de la Península Arábiga. Al llegar a Mesopotamia vieron el tinglado que había allí montado y se fueron sedentarizando.
Hablaban acadio, una lengua semítica. Por si no lo sabes, las lenguas semíticas reciben este nombre porqué la Bíblia dice que los asirios, los arameos y los hebreos son descendientes de Sem, uno de los hijos de Noé. El árabe y el etíope, que ocupan la primera y segunda posición en cuanto a hablantes, también son lenguas semíticas.
La cultura de los Acadios se desarrolló paralelamente a la Sumeria. Los acadios eran muy numerosos en la ciudad de Kish, aunque convivían con los sumerios por todo el territorio. De los sumerios tomaron la escritura cuneiforme, pero la adaptaron a su idioma, que no tenía nada que ver con el que se hablaba en las ciudades-estado sumerias, que eso ya te lo he contado en el primer vídeo, así que si no lo has visto, te dejo un enlace aquí arriba o en la descripción, para que puedas ir luego.
El Reinado de Sargón el Grande
Empecemos por conocer al personaje más famoso de los acadios: Sargón el maquinón, conocido oficialmente como Sargón el Grande.
No se sabe cuando nació, lo que sí que sabemos es que este buen hombre reinó del 2334 al 2279 A.C.
Los orígenes de Sargón son muy parecidos a los de Moisés, el de la Bíblia. ¿O quizás sean los de Moisés los que son muy parecidos a los de Sargón? Hijo de una sacerdotisa, al nacer, su madre lo metió en una cesta y lo abandonó en el río. El señor Aqqi, un aguador de la época, lo encontró y decidió criarlo.
Aprendió el oficio de jardinero, que practicó cuando fue mayor y de alguna manera acabó trabajando en el palacio del rey de Kish, Ur-Zababa, como copero real.
¿Y qué era un un copero? Pues nada más y nada menos que la persona encargada de servir las bebidas al rey. Algo así como un barman de la época (BAR-MAAAN) pero con más prestigio, pues eran considerados como hombres de confianza del rey (te puedes imaginar por qué) –imatge venenu-
Pues bien, entre su valioso cargo real y que la diosa Ishtar se había enamorado de él, a nuestro pobre huerfanito le pegó un subidón de autoestima y acabó dando un golpe de estado. Mira tú si era de fiar…
Destronó al antiguo rey, cogió a las tropas y se fue hacia Uruk a machacar a Lugalzagesi. Para hacerlo más épico, Sargón decidió colocar en una picota a Lugalzalesi y llevarlo al templo de Enlil en Nippur, para allí exhibir su victoria. Con la moral por las nubes, añadió Ur, Lagash y Umma a su lista de conquistas. Y cuando terminó con la expansión de su territorio fundó su nueva capital, Acad o Agade, cerca de Kish, aunque nadie la ha encontrado por el momento.
Sargón se las quiso dar de majete e instauró el idioma acadio como idioma oficial pero dejó que el sumerio se siguiera usando, además de permitir que los sumerios siguieran con sus cultos y tradiciones. También respetó a los ensi en las ciudades, pero como simples gobernadores que dependían de la autoridad real, y puso a sus colegas acadios en nuevos cargos que fue creando. Aquí nace el amiguismo en la política, algo tan habitual en nuestros días.
Tuvo varios hijos, de los que os hablaré en breve, y una hija, Enheduanna, a la que nombró sacerdotisa en el templo del dios Sin (dios de la luna). Enheduanna está considerada la creadora de poemas y oraciones más antigua, ya que no se conoce ninguna anterior. Como veremos a lo largo de la historia, su nombre seguramente no era el de nacimiento, si no un nombre puesto por la posición que ocupaba:
-’En’ significa sacerdotisa
-’Heduanna’ viene de la raíz “hedu” (adorno) y an (cielo) por lo que significa “adorno en el cielo”.
Si lo unimos todo nos queda la sacerdotisa del adorno en el cielo, siendo ella la sacerdotisa y la Luna el adorno en el cielo.
La mitología acadia es una adaptación de la mitología sumeria. Cambiaron algún nombre de dios al igual que los mitos. Aunque lo supieron hacer muy bien ya que llegaron a sitios como Egipto, no dejaban de ser adaptaciones y copias de los sumerios. Pero de esto ya os hablaré en el vídeo de mitos sumerios y acadios. (CUADRO DIOSES ACADIOS Y SUMERIOS)
Volviendo a nuestras aventuras con Sargón, una vez tuvo la zona controlada, decidió que tenía que seguir expandiendo sus territorios, ya que sus vecinos eran también reinos poderosos. Primero se fue para Siria y conquistó el reino de Ebla.
Después se fue para Elam, en el que reinaba la dinastía Awan, y también los sometió, incluida su capital Susa. No puso a gobernantes elegidos por él mismo, sino que dejó los que había en calidad de vasallos. Con esta victoria el Imperio Acadio, considerado por muchos el primer imperio de la historia, controlaba toda la zona desde el Mediterráneo al Golfo Pérsico.
Su reinado duró 56 años y hasta el día de su muerte estuvo apagando fuegos. Cuentan las fuentes babilonias que todos los reinos que controlaba se levantaron contra su poder, pero Sargón se puso al frente de las tropas una vez más y los venció a todos.
Estas fuentes también nos cuentan cómo un conjunto de pueblos del norte de Mesopotamia intentó derrotarlo, pero corrieron la misma suerte que los anteriores.
Los descendientes de Sargón
Muerto Sargón los sumerios pensaron: -Tate, vamos a recuperar nuestra libertad- Pero no fue así, pues ahí estaba el hijo de Sargón, Rîmush (2278-2270), para seguir los pasos de su padre y vencerlos de nuevo. Los del reino de Elam también intentaron recuperar su independencia, pero sufrieron el mismo destino que los sumerios. Los que sí tuvieron más suerte con el alzamiento fueron los de Ebla, que consiguieron quitarse el yugo acadio y recuperar su independencia.
9 años duró el reinado de Rimush y fueron sus servidores los que le pusieron fin asesinándolo. Su hermano Manishtusu fue su sucesor (2269-2255). También tuvo que sofocar revueltas por tierras persas, concretamente en el reino de Anshan, actual Shiraz.
Después se marchó hacia el reino de Magan, posiblemente en el actual Omán a buscar recursos como la diorita y de paso lo unió al Imperio. Finalmente le pasó como al hermano, los de su corte se aburrieron de él y también se lo cargaron.
Y diréis, ¿porque se fue tan lejos a buscar materiales? Pues la realidad es que hacia la zona de Siria no podía ir ya que allí se encontraba el reino de Ebla, que se había quitado el yugo acadio a la muerte de Sargón. Al norte, estaban los hurritas, que también eran enemigos. Y al este estaban los Gutis y los Lullubis, que controlaban todos los caminos entre los Montes Tauro y los Zagros, por lo que dominaban todas las rutas comerciales por las que les llegaban suministros como la piedra o los metales. O sea, que se puede decir que estaban prácticamente incomunicados, comercialmente hablando claro, de ahí la necesidad de Manishtusu de partir en busca de diorita.
Narâm-Sin
El siguiente rey fue Narâm-Sin (2254-2218), nieto de Sargón e hijo del anterior. Este se dedicó a recuperar todo lo que su padre y su tío habían perdido. Recuperó Ebla, conquistó el reino de Magan y se dice que hasta les quitó la Península del Sinaí a los egipcios, por lo que se hizo nombre como “rey de las cuatro regiones”. Se le subió tanto la fama a la cabeza que se hizo nombrar dios y construirse un templo en honor a él mismo.
También combatió a los Lullubi y los venció en una batalla, como se cuenta en la estela de Naram-Sin, pero luego le dieron pal pelo. A modo de curiosidad, es de esta estela de la que se extrae la idea de que se creía un dios, ya que se le representa con el casco de los cuernos, que estaba destinado a la representación de los dioses.
Existe un escrito posterior a los hechos, conocido como la “Maldición de Acad”, en el que da una explicación mitológica de la caída del imperio. En él nos cuentan como Naram-Sin saqueó el templo de Enlil en la ciudad de Nippur.
Enlil se cabreó y mandó a los habitantes de los montes Zagros, los Gutis, a destruir la capital Acadia, y vamos si lo consiguió. Muchos años estuvieron los gutis haciendo incursiones en la zona y la capital resistiendo, para caer finalmente alrededor del año 2154 a.C.
El principio del fin del Imperio Acadio
Sharkalissarri, hijo de Naram-Sin, fue el último gobernante del Imperio Acadio. Los Gutis ya habían empezado a atacar al final del reinado de Naram-Sin, pero durante el de Sharkalissari se intensificaron estos ataques, lo que hizo caer al imperio, que había durado cerca de un siglo. Finalmente fue Kutik-Inshushinnak, rey de Elam, quien lo venció y consiguió quitarle el yugo acadio a su tierra. Otro pueblo que aparece en este periodo y que viene a dar problemas son los amorritas o MARTUS, pueblo de origen semita que va a dar que hablar en próximos capítulos.
Con la caída del imperio acadio las ciudades Sumerias, como Ur, Uruk, Kish o Lagash, se independizaron y volvieron a su autonomía.
A partir de aquí se vivió una época complicada, con diferentes reyes y aspirantes a gobernantes sin las aptitudes necesarias. Los más relevantes fueron Dudu, que intentó recuperar los territorios perdidos, pero no lo consiguió y Shu-Durul, su sucesor, a quien aún le salió la jugada peor que a su padre.
El Periodo de los Gutis
Los gutis conquistaron Agade y formaron su propio reino, que duraría aproximadamente un siglo. Instauraron su propia monarquía, con reyes como Erredupizir, Sarlabag, Iarlabag o Tirigan, el último rey Guti.
Estos reyes aprendieron el acadio, intentaron seguir las costumbres del antiguo imperio y forjar el suyo propio, pero no se les dió muy bien.
La cultura y el poder en las ciudades sumerias empezó a resurgir cual ave Fénix. Por eso, este periodo es conocido como el Renacimiento Sumerio, pero del resurgir de los cabezas negras hablaremos en el siguiente video.