santoral catolico 26 de abril

El 26 de abril el santoral católico celebra a un conjunto destacado de santos y beatos que dejaron huella en la historia cristiana. Entre ellos sobresale San Isidoro de Sevilla, una de las figuras más influyentes del pensamiento cristiano en la Edad Media. Junto a él, se conmemora también a los papas mártires San Cleto (o Anacleto) y San Marcelino, además de otros santos que vivieron en contextos diversos, pero unidos por su fe y entrega a Dios.

San Isidoro de Sevilla (siglo VII)

Arzobispo de Sevilla, teólogo, historiador y Doctor de la Iglesia, San Isidoro es considerado el sabio más importante de su tiempo. Su obra cumbre, Las Etimologías, fue una enciclopedia del saber antiguo que iluminó la cultura medieval y preservó el conocimiento clásico. Sucedió a su hermano Leandro en la sede hispalense y consolidó la unidad litúrgica y disciplinaria en la península ibérica. Fue canonizado en el siglo XVI y declarado Doctor de la Iglesia en 1722.

San Cleto (o Anacleto), papa y mártir (siglo I)

Tercer sucesor de San Pedro en la Sede de Roma, San Cleto gobernó la Iglesia entre los años 76 y 88. Discípulo de San Pedro, fortaleció la comunidad cristiana en tiempos de persecución y ordenó numerosos presbíteros. Fue martirizado bajo el Imperio romano y sus restos reposan en la Basílica de San Pedro. Su fiesta se celebra cada 26 de abril.

San Marcelino, papa y mártir (siglo IV)

Papa entre los años 296 y 304, lideró la Iglesia durante la cruel persecución de Diocleciano. Según la tradición, murió mártir, aunque su figura también ha sido objeto de controversias históricas. Su valentía al frente de la comunidad cristiana en tiempos de violencia lo convirtió en símbolo de fidelidad.

Otros santos y beatos del 26 de abril

  • San Ricario o Riquerio (s. VII): Presbítero convertido a la vida penitente por la predicación de monjes escoceses, vivió como eremita en los bosques de Crézy (Francia).
  • Nuestra Señora del Buen Consejo: Advocación mariana venerada en Genazzano (Italia), asociada a una imagen milagrosa. El papa Pío IX incluyó su invocación en las letanías lauretanas.
  • San Pascasio Radberto (s. IX): Abad del monasterio de Corbie, defendió con claridad la doctrina eucarística sobre la presencia real de Cristo en la Eucaristía.
  • San Basileo (s. IV): Obispo y mártir en Amasea del Ponto, víctima de la persecución de Licinio.
  • San Esteban de Moscú (s. XIV): Evangelizador del pueblo zyrjani en Rusia. Inventó un alfabeto para su lengua y destruyó ídolos paganos.
  • Beato Julio Junyer Padern (s. XX): Sacerdote salesiano martirizado durante la persecución religiosa en España.
  • Beatos Domingo y Gregorio (s. XIII): Predicadores mendicantes en Aragón, conocidos por su vida de pobreza y evangelización itinerante.
  • Santos Guillermo y Peregrino (s. XII): Eremitas venerados en Foggia, Italia.
  • San Primitivo de Gabio: Mártir venerado en el lugar de Gabio, en la Vía Prenestina.